"La generación actual tiene una forma extraña de autoconciencia y ejerce sobre si una extraña forma de autocrítica. Tiene la conciencia de ser una generación de transición, o mejor todavía, tiene de si el concepto de ser como una mujer encinta: cree estar a punto de dar a luz y espera que nazca un niño fenómeno. Se lee con frecuencia que "se esta a la espera de un Cristóbal Colon, que descubrirá una nueva América del arte, de la civilización, de las costumbres". Se ha leído también que vivimos en una época pedantesca: se espera el nuevo Dante que sintetice poderosamente lo viejo y lo nuevo y proporcione a lo nuevo el impulso vital. Esta forma de pensar, recurriendo a imágenes míticas tomadas del desarrollo histórico del pasado, es de lo mas curioso e interesante para comprender el presente, su vació, su desocupación intelectual y moral. Se trata de una forma de "juicio del después" de las mas sorprendentes. En realidad, con todas las profesiones de fe de carácter espiritualista y voluntarista, historicista y dialéctico, etc., el pensamiento que domina es el evolucionista vulgar, fatalista, positivista. Se podría plantear así la cuestión: cada bellota puede pensar convertirse en encina. Si las bellotas tuviesen una ideología, esta seria precisamente la de
sentirse "cargada" de encinas. Pero en realidad, el 999 por mil de bellotas sirven de pasto a los cerdos y, a lo mas contribuyen a formar salchichas y mortadela".
Antonio Gramsci
Una consigna, entonces, para las virtuosas juventudes uribistas:
¡Vocacion de bellota, por la patria!
1 comentario:
Me alegra poder leerla nuevamente. Su post está tan bueno, que no se me ocurrió comentar nada, aparte de mandarle un saludo.
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